Después del verano, mucha gente busca clases de yoga en Durango. Tras las merecidas vacaciones, la vuelta al trabajo puede hacerse cuesta arriba, por lo que una meditación guiada que nos lleva a armonizar nuestro yo interior, trabajando cuerpo y mente, puede ser una buena alternativa. Porque el yoga no son solo meros ejercicios de relajación, sino una conexión directa hacia nosotros mismos.

Además, desde tiempos inmemoriales, la escritura ha sido considerada por algunos como un método de sanación, además de un agente liberador de creatividad. Muchos médicos lo recomiendan a modo de terapia para sacar fuera lo que nos duele dentro. Y muchos escritores o docentes de enseñanza lo recomiendan cómo acto creativo. En ambos casos siempre con un nexo en común, conectados desde el yo más profundo de la persona. Pero ¿qué ocurre cuando nos sentimos bloqueados? ¿Cómo sacar las palabras si ni siquiera sabemos cómo expresar esos sentimientos? ¿Cómo si pensamiento y emociones no consiguen estar conectados?

Si buscas clases de yoga en Durango puedes conseguirlo a través del yoga y la meditación. Con unos ejercicios relajantes se puede conseguir eliminar la rigidez diaria, controlando la respiración pausada se prepara al cuerpo para la fase de meditación dejando que este y la mente se conecten con el prana o energía universal, estableciendo esa conexión entre pensamientos y emociones que permiten llegar a un estado de equilibrio y armonía. Este puede ser un momento apropiado para coger cuaderno y lápiz y plasmar en el papel nuestro mundo sensorial y emocional.

Desde Ananta Yoga sabemos que el estrés del trabajo es un factor importante de desequilibrio de nuestro yo interno, por eso te proponemos el yoga y sus distintas técnicas como una filosofía de vida para mantener el equilibrio y la armonía en cualquier faceta de la vida.

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